jueves, 13 de agosto de 2009

EL VERANEO DE KALIM

Este año, como tantos niños, Kalim pasa el verano en la playa. Antes de las once sus pies se hunden ya en la fina arena ardiente. Prefiere caminar calzado con sus zapatillas viejas de goma, para no quemarse los pies. Recorre incansable la playa, fascinado por los colores que a su alrededor despliegan un gran abanico de sonrisas, chapoteos y juegos sin fin de otros niños. Kalim contempla embobado la gran plataforma azul que flota sobre el mar inmenso. Tiene un tobogán y dos escalerillas. Sueña que se desprende al fin de la camiseta gris que lleva pegada al cuerpo y se lanza al fresco azul para nadar libre hasta ella. Imagina que se pasa la mañana entera subiendo y bajando feliz por esas mismas escaleras, lanzándose al agua sin cesar, como el resto de chiquillería. Gritos, risas, zambullidas; sombrillas de colores, juguetes hinchables, castillos de arena… Kalim adora la playa. Sonríe y sigue soñando. “¡Eh, chico! Aquí tienes”, exclama la señora del sombrerito de paja. “¡Chico!”, vuelve a gritar, y el sonido agudo de su voz desgarra sin clemencia la burbuja que flotaba sobre la cabeza de Kalim, rompiéndose en mil gotitas de ilusión que se estrellan en la arena y desaparecen en sólo un instante. Kalim toma el billete de diez euros que le tiende la señora y a cambio le entrega el vestidito elegido. Recoge del suelo el fardo, repleto de ropa playera, se lo vuelve a cargar a la espalda y continúa su caminar lento, gritando de vez en cuando “¡Barato! ¡Vestido barato!”, mientras su mirada infantil se le pierde, como cada año, en el veraneo ajeno y en la fantasía, quizá, de uno propio.
Semifinalista del Certamen Fergutson de Microrrelato (Noviembre 09)

10 comentarios:

  1. Cuánta pena acumulada en tantas gotitas que se rompen. Cuántas frustraciones que envenan...Un niño debería siempre realizar algunos sueños, para que no se transformen mañana en violencia y vacío. Da mucho dolo que sea así. Y que la pena de ese niño conviva con la indiferencia de los grandes... "La camiseta gris que lleva pegada al cuerpo..."
    Cariños de Cas.

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  2. Me ha gustado Susana. Escrito correctamente y de fondo una historia tierna sobre la niñez y otra, más ácida sobre la injusticia.
    Gracias por dejarnos este relatito,
    un beso,
    Juanma

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  3. Ningun Kalim deberia trabajar mientras los demas niños se divierten en la playa.
    Es una injusticia.
    Un beso triste

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  4. Quizás a modo de consuelo haya que pensar que sin duda estaría mucho peor si no hubiese llegado a esas tierras. Ojalá logre Kalim abrirse camino para muy pronto poder disfrutar también del verano.


    un abrazo.

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  5. Ningún niño merece que le roben la infancia. Gracias por recordarnoslo.

    Un relato muy emotivo, que nos lleva a la reflexión.

    Besos

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  6. ¡Hola! Sigo fuera de Madrid, pero me alegra asomarme a mi blog y veros por aquí, Cassandra, Juanma, Tag, Neogeminis y Felisa.

    Aquí en la playa se ven muchos "Kalim". Su mirada me hace reflexionar cada día...

    Bueno: Aprovecho para mandaros un besazo grande a todos.

    Muack

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  7. Caxis la mar! Eso es explotación infantil y destrucción de sueños.

    Qué tristeza y qué bien escrito, Susana!

    PD: De verdad es necesaria la verificación de la palabra? Jooo...

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  8. Hola, Paloma.

    ¿A qué no siempre es fácil la verificación de la "maldita" palabra? Jejeje. Yo debo ser muy torpe, pero casi siempre tengo que escribirla dos veces.

    Oye: gracias por leerme.

    Te mando un besazo.

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  9. Susana, aunque ya sé que estás ocupadilla, te invito a participar en el Sábado Literario de Mercedes que esta semana conduzco yo, me gustaría que estuvieras en la lista con lo que bien que escribes seguro que sacas algo chulo.
    Un saludo,
    Juanma

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  10. A todos los Kalim de este mundo, a sus sueños recién estrenados y rotos antes de ser posible vivirlos, a todas las miradas que van más allá del horizonte y a los corazones que aprenden en soledad a oir el susurro de los anhelos que van y vienen como las olas del mar... A todas las miradas que, como las de Kalim, tienen también los que ya no saben soñar porque se les ha roto el alma en el empeño... A todas las lágrimas contenidas y a todas las vidas que tenían que haber sido felices y no lo han sido, va un abrazo inconmensurable de infinita ternura. !Si pudiera ser!

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